domingo, 22 de febrero de 2015

Las palabras se gastan - Julio Cortázar



Yo creo que las palabras se van gastando, así dejan de ser, se trasmutan y adquieren una personalidad diferente, es entonces cuando quedan huecas, son fantasmas y así se vuelven desechables, cuando eso sucede nos volvemos más pobres, mas ciegos, sordos y mudos, les dejo con un texto de Cortázar.

Alejandro.

Las palabras se gastan
Julio Cortázar
 
"Si algo sabemos los escritores es que las palabras pueden llegar a cansarse y a enfermarse, como se cansan y se enferman los hombres o los caballos. Hay palabras que a fuerza de ser repetidas, y muchas veces mal empleadas, terminan por agotarse, por perder poco a poco su vitalidad..."

"Sabemos muy bien cuáles son esas palabras en las que se centran tantas obligaciones y tantos deseos: libertad, dignidad, derechos humanos, pueblo, justicia social, democracia, entre muchas otras.

Sin la palabra no habría historia y tampoco habría amor; seriamos, como el resto de los animales, mera sexualidad. El habla nos une como parejas, como sociedades, como pueblos. Hablamos porque somos, pero somos porque hablamos…

Todo esto sería acaso menos grave si frente a nosotros no estuvieran aquellos que, tanto en el plano del idioma como en el de los hechos, intentan todo lo posible para imponernos una concepción de vida, del estado, de la sociedad y del individuo basado en el desprecio elitista, en la discriminación por razones raciales y económicas, en la conquista de un poder omnímodo por todos los medios a su alcance, desde la destrucción física de pueblos enteros hasta el sojuzgamiento de aquellos grupos humanos que ellos destinan a la explotación económica y a la alienación individual.
 
Si algo distingue al fascismo y al imperialismo como técnicas de infiltración es precisamente su empleo tendencioso del lenguaje, su manejo de servirse de los mismo conceptos que estamos utilizando aquí esta noche para alterar y viciar su sentido más profundo y proponerlos como consignas de su ideología. Palabras como patria, libertad y civilización saltan como conejos en todos sus discursos, en todos sus artículos periodísticos. Pero para ellos la patria es una plaza fuerte destinada por definición a menospreciar y a amenazar a cualquier otra patria que no esté dispuesta a marchar de su lado en el desfile de los pasos de ganso. Para ellos la libertad es su libertad, la de una minoría entronizada y todopoderosa, sostenida ciegamente por masas altamente masificadas. Para ellos la civilización es el estancamiento en un conformismo permanente, en una obediencia incondicional…

Por la muy simple razón de que nuestros enemigos han mostrado sus capacidad de insinuar, de introducir paso a paso un vocabulario que se presta como ninguno al engaño, y si por nuestra parte no damos al habla su sentido más auténtico y verdadero, puede llegar el momento en que ya no se vea con la suficiente claridad la diferencia esencial entre nuestros valores políticos y sociales y los de aquellos que presentan sus doctrinas vestidas con prendas parecidas; puede llegar el día en que el uso reiterado de las mismas palabras por unos y por otros no deje ver ya la diferencia esencial de sentido que hay en términos tales como individuo, como justicia social, corno derechos humanos, según que sean dichos por nosotros o por cualquier demagogo del imperialismo o del fascismo.

Un ejemplo entre muchos puede mostrar la cínica deformación del lenguaje por parte de los opresores de los pueblos. A lo largo de la segunda guerra mundial, yo escuchaba…que las noticias difundidas por la radio de Hitler comenzaban cada vez con esta frase: Aquí Alemania, defensora de la cultura». La repetía mientras millones de judíos eran exterminados en los campos de concentración.
 
Eso sucedía en los años cuarenta, pero la distorsión del lenguaje es todavía peor en nuestros días, cuando la sofisticación de los medios de comunicación la vuelve aún más eficaz y peligrosa puesto y desde los canales de la televisión o las ondas radiales puede invadir y fascinar a quienes no siempre son capaces de reconocer sus verdaderas intenciones.

Y así podíamos seguir pasando revista al doble juego de escamoteos y de tergiversaciones verbales que como se puede comprobar cien veces, golpea a las puertas de nuestro propio discurso político con las armas de la televisión, de la prensa y del cine, para ir generando una confusión mental progresiva, un desgaste de valores, una lenta enfermedad del habla, una fatiga contra la que no siempre luchamos como deberíamos hacerlo.

La tecnología le ha dado al hombre máquinas que lavan las ropas y la vajilla, que le devuelven el brillo y la pureza para su mejor uso. Es hora de pensar que cada uno de nosotros tiene una máquina mental de lavar, y que esa máquina es su inteligencia y su conciencia; con ella podemos y debemos lavar nuestro lenguaje político de tantas adherencias que lo debilitan. Sólo así lograremos que el futuro responda a nuestra esperanza y a nuestra acción, porque la historia es el hombre y se hace a su imagen y a su palabra".

sábado, 21 de febrero de 2015

Adendum al 14 de febrero - Diálogo entre Hans Castorp y Clawdia Chauchat, “La montaña mágica”


En estos días he leído de nuevo la Montaña Mágica de Thomas Mann, la primera vez que lo leí yo era un adolescente, fue junto con Muerte en Venecia uno de los textos más importantes, sobre todo por su plasticidad y sensualidad, años después ya casado, como mi entonces esposa era fan de Mann tuve la oportunidad de conocer toda su obra, pero también el placer de poder comentarla.

Para mi las dos obras de Mann que comento son de aquellas que como todo lo bello y sensible entra por los poros y nos va llenando. Al leer en estos días un tanto aciagos para mí en el amor, al leer el Diálogo entre Hans Castorp y Clawdia Chauchat, me pareció que era conveniente hablar de la carne, del cuerpo y del deseo en la vida, por eso decidí hacer un adendum al 14 de febrero, les dejo dos videos, Summer 78-Yann Tiersen y a Ludovico Einaudi en su presentación en el The Royal Albert Hall Concert en 2010.

Que les guste.

Alejandro.
 Diálogo entre Hans Castorp y Clawdia Chauchat.
Extractado de “La montaña mágica” 
escrita por Thomas Mann entre 1911 y 1923

 
 Vamos, es un incidente sin consecuencias, que pasará pronto.

- No, Claudia, sabes perfectamente que lo que dices no es verdad, lo dices sin convicción, estoy seguro. La fiebre de mi cuerpo y las palpitaciones de mi corazón enjaulado y el estremecimiento de mis nervios son lo contrario de un incidente, se trata nada menos que de mi amor por ti, ese amor que se apoderó de mí en el instante en que mis ojos te vieron, o más bien, que reconocí cuando te reconocí a ti, y es él evidentemente el que me ha conducido a este lugar....

- ¡Qué locura!

- ¡Oh! El amor no es nada si no es la locura, una cosa insensata, prohibida y una aventura en el mal. Si no es así es una banalidad agradable, buena para servir de tema a cancioncitas tranquilas en las llanuras. Pero que yo te he reconocido y que he reconocido mi amor hacia ti, sí, eso es verdad, yo ya te conocí antiguamente, a ti y a tus ojos maravillosos oblicuos, y tu boca y la voz con que me hablas; una vez ya, cuando era colegial, te pedí tu lápiz para entablar contigo una relación social, porque te amaba sin razonar, y es por eso, sin duda, por mi antiguo amor hacia ti, por lo que me quedan esas marcas que el médico ha encontrado en mi cuerpo y que indican que en otro tiempo yo estaba ya enfermo... te amo, te he amado siempre, pues tú eres el Tú de mi vida, mi sueño, mi destino, mi deseo, mi eterno deseo.
 
- ¡Vamos, vamos! –dijo ella-. ¡Si tus preceptores te viesen!

- Me tienen sin cuidado todos.... la República elocuente, el progreso humano en el tiempo, pues ¡te amo!

Ella acarició dulcemente con la mano los cabellos cortados al rape en la nuca.

- Pequeño burgués –dijo. Lindo burgués de la pequeña mancha húmeda. ¿Es verdad que me amas tanto?

Exaltado por ese contacto, ya sobre las dos rodillas, la cabeza echada hacia atrás y los ojos cerrados, él continuó hablando:
 
- Oh, el amor, ¿sabes.....? El cuerpo, el amor, la muerte, esas tres cosas no hacen más que una. Pues el cuerpo es la enfermedad y la voluptuosidad, y es el que hace la muerte; sí, son carnales ambos, el amor y la muerte, ¡y ese es su terror y su enorme sortilegio! Pero la muerte, ¿comprendes?, es, por una parte, una cosa de mala fama, impúdica, que hace enrojecer de vergüenza; y por otra parte es una potencia muy solemne y muy majestuosa (mucho más alta que la vida riente que gana dinero y se llena la panza; mucho más venerable que el progreso que fanfarronea por los tiempos) porque es la historia, y la nobleza, y la piedad, y lo eterno, y lo sagrado, que hace que nos quitemos el sombrero y marchemos sobre la punta de los pies....De la misma manera, el cuerpo, también, y el amor del cuerpo, son un asunto indecente y desagradable, y el cuerpo enrojece y palidece en la superficie por espasmo y vergüenza de sí mismo. ¡Pero también es una gran gloria adorable, imagen milagrosa de la vida orgánica, santa maravilla de la forma y de la belleza, y el amor por él, por el cuerpo humano, es también un interés extremadamente humanitario y una potencia más educadora que toda la pedagogía del mundo....! ¡Oh, encantadora belleza orgánica que no se compone de pintura al óleo ni de piedra, sino de materia viva y corruptible, llena del secreto febril y de la podredumbre! ¡Mira la simetría maravillosa del edificio humano, los hombros y las caderas y los senos floridos a ambos lados del pecho, y las costillas alineadas por parejas y el ombligo en el centro, en la blandura del vientre, y el sexo oscuro entre los muslos! Mira los omóplatos, cómo se mueven bajo la piel sedosa de la espalda, y la columna vertebral que desciende hacia la doble lujuria fresca de las nalgas, y las grandes ramas de los vasos y de los nervios que pasan del tronco a las extremidades por las axilas, y como la estructura de los brazos corresponde a la de las piernas. ¡Oh, las dulces regiones de la juntura interior del codo y del tobillo, con su abundancia de delicadezas orgánicas, bajo sus almohadillas de carne! ¡Qué fiesta más inmensa al acariciar esos lugares deliciosos del cuerpo humano! ¡Fiesta para morir luego sin un solo lamento! ¡Sí, Dios mío, déjame sentir el olor de la piel de tu rótula, bajo la cual la ingeniosa cápsula articular segrega su aceite resbaladizo! ¡Déjame tocar devotamente con mi boca la “Arteria femoralis” que late en el fondo del muslo y que se divide, más abajo, en las dos arterias de la tibia! ¡Déjame sentir la exhalación de tus poros y palpar tu vello, imagen humana de agua y de albúmina, destinada a la anatomía de la tumba, y déjame morir con mis labios pegados a los tuyos!
 
No abrió los ojos después de haber hablado, permaneció sin moverse, la cabeza inclinada, las manos que sostenían el pequeño lapicero de plata, separadas, temblando y vacilando sobre sus rodillas.

- Eres en efecto, un galanteador que sabe solicitar de una manera profunda, a la alemana- dijo ella y le puso un tricornio de papel.

- ¡Adiós, príncipe Carnaval! ¡Esta noche la línea de tu fiebre será muy mala, te lo predigo!- al decir esto se levantó de la silla, se dirigió a la puerta, dudó un momento en el umbral, dio media vuelta elevando uno de sus brazos desnudos, con la mano en el pestillo y, por encima del hombro, dijo en voz baja:


- No te olvides de devolverme el lápiz.



sábado, 14 de febrero de 2015

El lenguaje del cuerpo, amor y tantra

  
“No hay amor sin erotismo como no hay erotismo sin sexualidad. Pero la cadena se rompe en sentido inverso: amor sin erotismo no es amor y erotismo sin sexo es impensable e imposible
La llama doble, Octavio Paz
 
Cuando pensamos en el amor, nos referimos por lo general al de pareja, para ser consecuentes con esto, los hoteles se llenan con duración breve, no por noches, sino por horas, sin embargo, por lo general suponemos una disociación entre el cuerpo (somos cuerpo no ángeles, decía Teresa de Ávila) y el alma, así el amor romántico con fuertes raíces medievales, de Chrétien de Troyes (quien en su origen, da pie al, ya que romance constituye uno de los mejores ejemplos del llamado “amor cortés”, es decir: un tipo de acercamiento amoroso que imponía conductas fuertemente codificadas para el hombre y la mujer, que incluían la humillación, el renunciamiento y el sacrificio y que se veían recompensados con un amor que excede los límites humanos para alcanzar una dimensión divina o trascendente.).

Más el amor encarna y es deseo, sexo, pasión, hoy les dejo para algo en lo que creo, en la posibilidad de hacer del sexo un camino hacia el espíritu y la paz, el Tantra, ojala y lo practiquen, vale la pena, para empezar algo de Octavio Paz, después algunas ideas y conceptos, concluyo con imágenes, también hace algún tiempo escribí “Algo sobre la sensualidad, el erotismo y el Kama Sutra” http://alejandro-ellugardetodos.blogspot.mx/2013/02/algo-sobre-la-sensualidad-el-erotismo-y.html

Para concluir algunas imágenes y un parar de mantras que son esplendidos y una película Argentina, magnifica, un poco de amor y tantra en "No mires para abajo"

Alejandro, 14 de febrero, 2015
 
El amor es una atracción hacia una persona única: a un cuerpo y a un alma. El amor es elección; el erotismo aceptación. Sin erotismo -sin forma visible que entra por los sentidos- no hay amor; pero el amor traspasa al cuerpo deseado y busca al alma en el cuerpo y, en el alma, al cuerpo, a la persona entera

El amor es intensidad y por eso es una distensión del tiempo: estira los minutos y los alarga como siglos. El tiempo, que es medida isócrona, se vuelve discontinuo e inconmensurable
 
El amor no es la eternidad; tampoco es el tiempo de los calendarios y los relojes, el tiempo sucesivo. El tiempo del amor no es grande ni chico: es la percepción instantánea de todos los tiempos en uno solo, de todas las vidas en un instante. No nos libra de la muerte; pero nos hace verle la cara.

Pero no es menos cierto que el amor es a veces triste como la muerte, tormento soberano y mortal. Es más: el verdadero amor se percibe mejor a sí mismo y, por decirlo así, se mide y calcula a sí propio en el dolor y sufrimiento de que es capaz.
 

Amar:
hacer de un alma un cuerpo,
hacer de un cuerpo un alma,
hacer un tú de una presencia.
Amar:
abrir la puerta prohibida,
pasaje
que nos lleva al otro lado del tiempo.

Amar es perderse en el tiempo,
ser espejo entre espejos


amar es dos,
siempre dos,
abrazo y pelea,
dos es querer ser uno mismo.
dos no reposa
no está completo nunca.
Amor, isla sin horas,
isla rodeada de tiempo,
claridad
sitiada de noche.

Amar es tener ojos en las yemas,
palpar el nudo en que se anudan
quietud y movimiento.

Tal vez amar es aprender
a caminar por este mundo.
Aprender a quedarnos quietos
como el tilo y la encina de la fábula.
Aprender a mirar.

 
Tantra

La palabra sánscrita tantra significa la urdimbre de un telar, o la hebra de una trenza. Como los hilos de un telar, las prácticas del tantra sirven como una estructura para entrelazar los temas del sutra para tejer la alfombra de la iluminación. Más aun, el tantra combina expresiones físicas, verbales y mentales de cada práctica y las entreteje creando un sendero holístico de desarrollo. Como no se puede integrar y practicar simultáneamente todos los temas del sutra sin previamente haberse entrenado en cada uno individualmente, la práctica del tantra es extremadamente avanzada.

La raíz de la palabra tantra significa estirar o continuar sin descanso. Enfatizando esta connotación, los académicos tibetanos tradujeron el término como gyu (rgyud), que significa continuidad ininterrumpida. Aquí, la referencia es a la continuidad sobre el tiempo, como en una sucesión de momentos en una película; más que la continuidad en el espacio; como una sucesión de segmentos de pavimento. Más aun, las sucesiones que se discuten en el tantra son como películas eternas: no tienen principio ni fin.

Las filosofías espirituales antiguas – como el Tantra, Budismo, Yoga y Taoísmo – y las modernas – como el movimiento de la Nueva Era – afirman que la energía vital que anima a todo lo que existe, incluyendo los seres humanos y la vida sobre la Tierra, proviene de una única fuente universal. Es así como nuestra energía de vida primordial, es decir, nuestra energía sexual, es parte de esta energía creativa universal. La energía vital, también llamada por las corrientes orientales Chi o  Kundalini, se asienta en los órganos sexuales y es la energía que usamos todos los días en las distintas actividades diarias, y no sólo durante el acto sexual y la procreación. Por ese motivo, es importante nutrirla día a día, ya que nacemos con una cantidad limitada de energía que podemos potenciar mediante actividades saludables para vitalizar el cuerpo, la mente y el alma permanentemente. La energía Kundalini nos da vida, circula por todos nuestros órganos y es una energía que también sube hasta los chakras superiores para elevar nuestro estado de consciencia y promover nuestra evolución espiritual.
 
La sexualidad se vive en el eterno presente
La sexualidad tiene mucha similitud con la meditación y otras prácticas para el desenvolvimiento espiritual, como la oración y la detención para observarnos a nosotros mismos. En general, las prácticas espirituales buscan armonizar nuestros pensamientos y sentimientos, lograr una visión más amplia y objetiva de nosotros mismos y de nuestra realidad cotidiana, y dejar de identificarnos con el ego. Una de las primeras recomendaciones para ello, es ubicarse en el presente, que es nuestro campo de trabajo continuo, lo único que realmente existe y que podemos cambiar. Sólo en el presente podemos vivir, compartir y experimentar la vida y la sexualidad. Mientras más nos centremos en el presente, más presentes estaremos en nuestro cuerpo y en nuestro espíritu, y más se ampliará nuestra capacidad de percibir la realidad, así como de sentir y vivir intensamente y a plenitud las experiencias a través de nuestros sentidos.

La vida se vuelve más vibrante y plena cuando dejamos pasar – como si fueran nubes que vienen y van – los pensamientos y sentimientos. Así descorremos una especie de cortina o manto que nos impide ver, sentir y experimentar profundamente la vida. Cuando estamos conectados desde nuestro cuerpo físico, arraigados en la Tierra, tenemos más fuerza interior para conectarnos con energías sutiles y espirituales que harán que nuestra vida de todos los días, desde el cepillarnos los dientes, cuidar a los niños o hacer el amor, adquiera más sentido y sepamos con certeza que nuestras vidas individuales forman parte de una gran red llena de sentido.
 
En cuanto a la sexualidad, si no estamos conectados al cuerpo y al presente, nuestra capacidad para sentir y expandir el placer sexual estará disminuida. Por ello, si nos sentimos poco sensuales o con bajo deseo sexual, funciona el relajarnos, respirar profundamente o de manera más acelerada para activar la energía, además de enfocarnos en el placer sensorial y en la persona con la que estamos compartiendo.
 
Según el Tantra el cuerpo femenino es un regalo de la Diosa. Detrás de la lujuria animal del macho, incluso detrás del ansia de amor, las fuerzas cada vez más profundas nos están atrayendo a los hombres a las mujeres, el deseo de fusionarse para siempre y unirse con la Divinidad Femenina
 
Tu cuerpo es necesidades más profundas ~ Tu cuerpo necesita que se celebrará, sostener, al ser tocado y al tacto. Ninguna de estas necesidades debe ser despreciada, negado o reprimido. Pero hay que seguir buscando necesidad más profunda de su cuerpo para el amor genuino. Cada vez que puede ir más allá de los deseos superficiales del cuerpo para el amor, usted está trayendo su cuerpo a casa y avanzar en la integración y la unidad. ~ Henri Nouwen

La belleza de una mujer es en el placer... el sonido que hace al dar el primer bocado... la mirada en su cara cuando con los ojos cerrados el chocolate se derrite en tu boca... la mirada brillante de ensueño en sus ojos se abrieron lentamente... cuando parece que viajar a algún sitio desconocido a nosotros los hombres... haciéndonos creer en un cielo Mujer...
 
Se diferencia entre el femenino y lo masculino:

A pesar de las convenciones sociales y culturales, ideologías políticas y teorías feministas que tenemos. Una persona con una naturaleza sexual masculino se identifica con la conciencia y propósito de la vida, la dirección y la libertad es más importante que el anhelo por el amor libre. Una persona con una naturaleza sexual femenina se identifica con el amor y la luz, quiere irradiar y brillo, sentir relaciones conectadas y prioridades.

Dado que todos tenemos dos cualidades femeninas y masculinas en que podemos sentir y expresar tanto, pero es importante para identificar la naturaleza sexual alguna vez dominante para entender uno mismo y crear mejores relaciones
 

RICEL

Me deslizo en tu cuerpo con mi mente y mis manos.
Acaricio tus pechos y me embriago soñando.
Me alimentas con ellos, son puro encanto
Y acaricio tu cuerpo todo el tiempo que estamos.

En tu cuerpo suavemente me expando
Llegando estoy a tu vientre y nos seguimos amando.
Mi energía tú sientes y sigues gozando.
Nos fundimos en uno…nos estamos curando.

Todo el amor que tengo te estoy dando.
Todo el amor que tienes me estás entregando.
Nos toca revivir ahora, remotos años.
Recuerda todo el amor que nos estamos dando.

Acarician mi piel tus manos,
…tus labios muerden mi cuerpo,
Te pido no aprietes tanto,
…dejemos algo…un poco
Para gozar OTRO TANTO.
 
TUS SUEÑOS

Si tu amor por mí
Es verdadero
Te espero en mis brazos
Cumpliremos nuestros sueños.

Descubrir juntos
Algunos puntos en tu cuerpo
Que merecen atención….
Sentir tu vibración
Viviendo al unísono sin limitación
Resolviendo todo el amor…hoy
El Universo nos regala su Bendición.

Te ofrezco esa búsqueda
Conozco esos puntos
Realizar tus sueños
Viendo una vida nueva, mejor.
Tan gratificante…tan placentera
Con mucho amor.

Serás la protagonista
El Capitán del barco.
Cumplirás tus fantasías
No sólo hoy.
Cada día nuevo
Naciendo una nueva flor.
Sentirás todo sonríe
Apreciaras una vida de esplendor.
Redoblarás tu Fe,
Tu confianza, tus esperanzas,
Tu éxtasis percibirá el cielo
Sin explicarte el por qué,
Tú “Ser” que todo lo sabe
Gozoso te ayudará a comprender
Que el amor penetro muy hondo
En tu corazón, en todo tu “Ser”.

INTIMIDAD
Rumi

Quiero verte,
conocer tu voz y
reconocerte cuando llegas por primera vez a la vuelta,
percibir tu aroma cuando entro en una sala en la que has dejado,
conocer la elevación del talón y deslizamiento del pie.
Quiero llegar a estar familiarizado
con la forma de tus labios
luego dejarlos aparte,
Quiero saber la alegría de cómo susurras más.
 

 No mires para abajo