lunes, 26 de mayo de 2014

Tristeza



A veces, la tristeza pasa a nuestro lado, se sienta junto a nosotros y nos habla, nos hace sentir tristes, entonces recordamos que somos humanos.

Hoy (domingo por la tarde) estoy triste, esa sensación de soledad, de un gran vacio, de saber que desde hace tanto tiempo que está conmigo que ya llenarlo no es importante, así creo que nos vamos construyendo.

Creo que la vida se trata no de lograr los sueños, sino de hacer que estos siempre existan, de que no perdamos la capacidad del asombro.

Acaso ese es el gran vacío, el que dejaron los sueños, ahora ya no están, son como decía el buen León Felipe extracto de Ganarás la luz: “Ahora todo se ha roto en el mundo. Todo. Hasta las herramientas del filósofo. Y el salmo ha enloquecido: se ha hecho llanto, grito, aullido, blasfemia…y se ha arrojado de cabeza en el infierno Aquí están ahora los poetas. Aquí estoy yo por lo menos”

No es posible entristecerse por lo no hecho, por lo no vivido, así que la melancolía proviene de la memoria, de lo sucedido, de aquello que está ahí aunque ya se fue, aunque ya se terminó.

Es como recorrer la trama y la urdimbre, volver a sentir los hilos, los nudos y traer a nuestra mente las sensaciones y los colores, volver a recitar las viejas oraciones, la tristeza es esa nao que siempre llega y después parte nuevamente a mares ignotos, sin estar ahí, quedándonos en tierra y mirando co se va, así los recuerdos son los hilos y los vientos, las estrellas que miramos desde el astrolabio, cálculos para llegar a la orilla donde todo se va para no regresar.

Cuando mi nieta cumplio tres añitos (si, son poquitos y es toda una vida completa, llena de un pasado, el suyo y el nuestro y de un futuro, el suyo), ella sencillamente bailo y lo hizo con tanto gusto que el recuerdo es la oración de agradecimiento.

La tristeza de que eso ya se fue, la posibilidad de que pueda volverla a ver bailar.

La tristeza…
A los 16 años que estaba fascinado por ella, aunque no lo entiendo muy bien por qué...
A los 23 años que tenía tantas cosas que hacer, que no pensé más en ello...
A los 33 años que poco a poco empezar a recordar y tienes la idea incómoda que podría haber algo de verdad fea en ella...
A los 40 años de entender por qué estabas fascinado por ella hace muchos años y que la constatación te hace temblar...

Realmente, no sé cómo continuar. Tenía un amigo, hace muchos años que me decía, disfruta de tu tristeza, aprende a disfrutar de tu existencia. Y llora, llora…
 
Llorar a lágrima viva

Llorar a chorros.
Llorar la digestión.
Llorar el sueño.
Llorar ante las puertas y los puertos.
Llorar de amabilidad y de amarillo.
Abrir las canillas,
las compuertas del llanto.
Empaparnos el alma,
la camiseta.
Inundar las veredas y los paseos,
y salvarnos, a nado, de nuestro llanto.
Asistir a los cursos de antropología,
llorando.
Festejar los cumpleaños familiares,
llorando.
Atravesar el África,
llorando.
Llorar como un cacuy,
como un cocodrilo...
si es verdad
que los cacuyes y los cocodrilos
no dejan nunca de llorar.

Llorarlo todo,
pero llorarlo bien.
Llorarlo con la nariz,
con las rodillas.
Llorarlo por el ombligo,
por la boca.
Llorar de amor,
de hastío,
de alegría.
Llorar de frac,
de flato, de flacura.
Llorar improvisando,
de memoria.
¡Llorar todo el insomnio y todo el día!


Oliverio Girondo 

lunes, 19 de mayo de 2014

Los limites del perdón, la banalidad del mal. Simon Wiesenthal y Hanna Ardent




"Una filosofía de la humanidad se distingue de una filosofía del hombre por su insistencia en el hecho de que no es un Hombre, hablándose a sí mismo en diálogo solitario, sino los hombres hablándose y comunicándose entre sí, los que habitan la tierra"
Hanna Ardent

Eichmann en Jerusalén, la banalidad del mal – Hanna Ardent

En un periódico de tiraje nacional leí esta nota: “Las más de 200 adolescentes secuestradas el pasado 14 de abril de 2014 en Nigeria por milicianos del grupo islamista Boko Haram estarían siendo violadas hasta 15 veces al día”, según ha relatado una chica que logró huir de los milicianos, en declaraciones recogidas por el portal informativo nigeriano” The Trent.

Es curioso, esta nota, que es terrible, en México y en tantos lugares ha abierto la puerta a una discusión y a la determinación de resolver uno de los actos más ominosos que los seres humanos realizamos, y digo que es curioso, porque no es un caso singular, en el mundo miles de personas son secuestradas por múltiples razones, ninguna es valida por si misma, ni moral ni ética, más este caso no es singular, cada dá existe un desprecio por la vida que cubre la faz de la tierra, por ello me atrevo a traer a colación algunos textos de Hanna Ardent, quien fue testigo y cronista del juicio de Eichmman en Jerusalén en 1961 y de donde nace su texto y que junto con otros de su obra habla sobre el mal, algo tan común y tan poco entendido.

También deseo traer a colación otra parte de la moneda, el perdón, dos personas creo que lo han trabajado ambos devastados y obligados a ser objeto del mal, ambos hablan sobre el perdón-

Primo Levi. Autor de “Si esto es un hombre


Simon Wiesenthal, autor de “Los límites del Perdón”


Los dejo con Hanna Ardent.

Alejandro.
 
“Jamás ha sido tan imprevisible nuestro futuro, jamás hemos dependido tanto de las fuerzas políticas, fuerzas que parecen pura insania y en las que no puede confiarse si se atiene uno al sentido común y al propio interés. Es como si la Humanidad se hubiera dividido a sí misma entre quienes creen en la omnipotencia humana (los que piensan que todo es posible si uno sabe organizar las masas para lograr ese fin) y entre aquellos para los que la impotencia ha sido la experiencia más importante de sus vidas”, este es uno de los párrafos con los cuales inicia Hanna Ardent “Los orígenes del totalitarismo”

El mal radical es “absoluto porque ya no puede ser deducido de motivos humanos comprensibles”

El mal no es nunca “radical”, sólo es extremo, y carece de toda profundidad y de cualquier dimensión demoníaca. Puede crecer desmesuradamente y reducir todo el mundo a escombros precisamente porque se extiende como un hongo por la superficie. Es un “desafío al pensamiento”, porque el pensamiento trata de alcanzar una cierta profundidad, ir a las raíces y, en el momento mismo en que se ocupa del mal, se siente decepcionado porque no encuentra nada. Eso es la “banalidad”. Sólo el bien tiene profundidad y puede ser radical."


  • Eliminación de la persona jurídica: No hay motivos para ser confinado.
  • Eliminación de la persona moral: No quedan opciones éticas buenas.
  • Eliminación de la espontaneidad: Los prisioneros se convierten en una mera amalgama de reacciones previsibles, pierden toda individualidad.

La triste verdad es que el mal lo hacen, la mayor parte de las veces, aquellos que no se han decidido, o no han decidido actuar, ni por el mal ni por el bien. (…) Lo más grave, en el caso de Eichmann, era precisamente que hubo muchos hombres como él, y que estos hombres no fueron pervertidos ni sádicos, sino que fueron, y siguen siendo, terrible y terroríficamente normales. Desde el punto de vista de nuestras instituciones jurídicas y de nuestros criterios morales, esta normalidad resultaba mucho más terrorífica que todas las atrocidades juntas, por cuanto implicaba que este nuevo tipo de delincuente (…) comete sus fechorías en circunstancias que casi le impiden saber o intuir que realiza actos de maldad.
 
Pero allí no se agota el enorme caudal de cuestiones que rozan con el derecho y la justicia. Uno de los que con más pasión trata la autora es el de la autoría por el dominio sobre un aparato verticalizado de poder. De la contemplación que efectúa Arendt de la maquinaria nazi, concluye razonando igual que los jueces en la sentencia: el grado de responsabilidad aumenta a medida que nos alejamos del hombre que sostiene en sus manos el instrumento fatal. Otra cuestión de imprescindible tratamiento es la de la aparente imposibilidad de actuación de otro modo que a menudo se invocaba por parte de nazis acusados de delitos. ¿Cuál era la suerte corrida por el agente que se negaba a participar de actos aberrantes o genocidas? Con asombro, Arendt descubre que no hay ni una sola prueba de actos de venganza o represalias severas por parte del régimen contra quien se negaba. Ella nos recuerda con dureza, que en aquellos tiempos, todas las actuaciones estatales estaban respaldadas en leyes, decretos y reglamentos, cuando no en la propia palabra del Führer, considerada ley suprema inclusive por prestigiosos constitucionalistas. Es decir, que se daba la paradoja de que actos aberrantes y constitutivos de genocidio y de violaciones a los derechos humanos básicos, formaron parte entre 1933 y 1945 del ordenamiento jurídico del Estado. Lo criminal desde el punto de vista de los valores humanos hizo que se convirtiera en lo legal desde el punto de vista normativo. En palabras de la autora, estábamos en presencia de un Estado Criminal. Y precisamente, dentro de las reglas jurídicas de ese Estado Criminal, desobedecer una orden se convertía en un delito, en una violación a la norma estatal, aunque la norma dijese “debes participar en la matanza de judíos”. Ello, sumado al poderoso efecto que produce el ejercicio burocrático del poder estatal –por el cual hasta lo abyecto es convertido en algo rutinario y desapasionado (banal).

Otro tema central de la obra Arendt, es la escasísima emergencia de héroes provenientes desde las propias entrañas del nazismo.

Estas consideraciones se extienden al papel cumplido por los Judenrat, Consejos Judíos con los que solía entenderse Eichmann, y que allanaron el camino para que la maquinaria de exterminio nazi funcionara a pleno; la autora pone la lupa sobre su actuación y emite un juicio lapidario: casi todos ellos traspasaron el límite entre “ayudar a huir” y “colaborar en la deportación” de sus representados, sin que la excusa del mal menor pueda ser admisible, dado que la raquítica cifra de sobrevivientes cancela dicha alegación (de acuerdo con Ardent, en Hungría se salvaron 1.684 judíos gracias al sacrificio de 476.000 víctimas). La autora considera que en aquellas naciones en donde hubo una oposición decidida a la deportación, los nazis carecieron de la convicción necesaria para doblegarla, comportamiento que la llevó a concluir que el ideal de “dureza” de los nazis (o la apariencia monolítica de todo régimen totalitario) no era más que un mito dirigido al autoengaño, que ocultaba el cruel deseo de sumirse en un estado de conformidad a cualquier precio. También reserva imputaciones a muchos de los Estados sometidos por el yugo nazi: con excepciones dignas de mención (Italia, Bulgaria y especialmente, Dinamarca), los poderes punitivos locales fueron puestos, no sin entusiasmo en algunos casos (por ej., Polonia, Rumania, Ucrania, Lituania), al servicio de las S.S. para el asesinato de judíos, ya sea en el mismo lugar de su captura, o luego de su reasentamiento. Se puede observar que la verdadera magnitud del fenómeno del antisemitismo, latente en la cultura del centro y este europeos durante siglos y que implosionó bajo los designios de Hitler.

La obra además, tiende puentes permanentes con el terrorismo de estado, como cuando aborda el papel cumplido por las distintas agencias y corporaciones (Iglesias, partidos políticos, universidades, medios de comunicación, etc.) frente a dicho fenómeno, o bien al pronosticar fatídicamente que los totalitarismos modernos no conceden a sus enemigos la muerte del mártir, sino la simple, silenciosa y anónima desaparición.

viernes, 9 de mayo de 2014

Frases que dicen las mamas - 10 de mayo, 2014


Cuando era niño, cada 10 de mayo era un suplicio, porque en México ese día se celebra a las madres, hay que hacer el regalo, un costurero, un portarretrato o lo que se le ocurra a él o la maestra, preparar el bailable y hasta una representación, con poemas cursis y simplones, pero eso si, que a las mamas les encantan.

Eso no solo me tocó a mí, mis hijos también pasaron por ello y creo que mi nieta también lo hará, de hecho es un casi un delito y un pecado de lesa humanidad no festejar a la madre.

Tenemos un monumento, de una señora fea (de verdad) y que en la placa dice “A aquella que nos amó antes de conocernos”, lo dejo así, sin comentarios.

En esta ocasión dedico este post a los y las hijas, las mamas y las abuelas, para que con alegría recordemos a nuestra progenitora, con mucho afecto y respeto, algunas frases que encontré y me dijeron y que las mamas siempre las dicen (es como un código secreto).

Felicidades y que se diviertan.


Alejandro.
 
Te doy 'tres' para que te siente.
Estate quieto, parece que tienes chinches en las nalgas.
Te estás o te estoy (se refiere e estarse quieto o te aplican un correctivo)
Cállate o te doy para que llores con ganas.
Pero deja que venga tu padre.
Te voy a regalar al señor del costal.
Si no limpias no sales.
Te encanta vivir en el mugrero.
¡Arregla tu chiquero!
Limpia porque aquí no hay sirvienta.
Mientras vivas en esta casa se hace lo que yo diga.
Un día me vas a matar de un coraje.
Lo haces porque soy tu madre y punto.
Esta casa no es hotel.
Vaya, hasta que te acordaste que tienes madre.
Que te adopten en casa de tus amigotes.
Cuando tengas hijos te vas a acordar de mí.
Todo lo que he hecho por ustedes y vean como me pagan.
Un día se van a levantar y no me van a encontrar.
¡Ya tendrás a tus hijos!
¡Te lo dije!
¡Esa muchachita no te conviene!
¡Te lo digo por tu bien!
¡Ahorita que llegue tu papá arreglamos cuentas!
¡Acuérdate que soy tu madre!
¡Eres idéntico a tu padre!
¡Un día me van a matar de un coraje!
¿Qué creen que estoy pintada o qué?
¿Qué creen que soy su sirvienta?
¡Mira nada más cómo vienes!
¡No me respondas!
¿Qué, tus amigos no tienen casa?
¡Vete por las tortillas!
¡Te dije cilantro!
¡Esto me va a doler más a mí que a ti!
No empieces andar tocando las cosas, Compórtate, Saludas a todos, Das las Gracias y pides las cosas Por favor.
…deja el chingado aparatito y hazme caso... no es aparatito es el Blackberry.
Algún día me entenderás...
Ya vez todo lo dejas para el final.
¡Te lo dije!
Ponte un suéter, ya mero sales encuerado.
¡Déjate ahí! ¡Te van a salir pelos en la mano!
¿Qué? ¿se mandan solos o qué…?
Esa muchachita no te conviene.
Te lo digo por tu bien.
¿Quién crees que lava la ropa?
Ahorita que llegue tu papa arreglamos cuentas.
¡Acuérdate que soy tu madre!
Eres idéntico a tu padre.
Un día me van a matar de un coraje.
¿Por qué me castigo Dios con estos hijos?
Ya tendrás a tus hijos.
¿Qué creen que estoy pintada o qué?
¿Qué creen que soy su sirvienta?
Síiiiguele Síiiiguele, ya verás cómo te va.
¡Acábate (come) el hígado encebollado!
¡Ándale, sigue tomando y acábate el hígado! (se refiere a la visera humana)
¡No me respondas! (esta frase viene seguida de un "Por qué no contestas!" cuando, obedientemente, la habías dejado hablar sin responderle, por que ella te lo había pedido).
Deberías estar agradecido.
¡Mira nada más como vienes!
De seguro vienes del hotel.
Que sea la última vez!
Hasta que te acordaste que tienes madre.
Deberías de aprender de fulanito. (Fulanito - cualquier otro individuo que sea mejor que tú, según tu madre)
Fulanito si quiere a su mama.
Para mí siempre serás mi bebe.
¿Quién es mi niño?
No tienen llenadera.
¡Si no te acabas el chayote va a venir el señor del costal! [chayote: verdura || señor del costal: cualquier tipo que te pueda robar]
¿Qué te cuesta avisar?
Para eso se inventó el teléfono.
¡Arregla tu chiquero! (chiquero: lugar lleno de lodo donde se revuelcan los puercos, y en este caso, tú recamara)
No le pongas seguro a la puerta del baño.
35. Huele a petate quemado. [o que sería un sinónimo de huele a mariguana]
Aquí no es hotel, así que no llegues cuando te dé la gana!
Ya duérmete, caramba.
Ya lava tus tenis.
Cuando tengas tu casa harás lo que quieras.
¡Levántame la mano y se te va a secar! [osea, buena excusa para que no le agredas]
¿Otra vez te vas con tus amigotes?
¿Que, tus amigos no tienen casa? (lo dicen cuando tus amigos no salen de tu casa a diario)
Vete por las tortillas.
No te tardes y me traes el cambio.
¡Te dije cilantro! (cuando vas a comprar y en lugar del bendito cilantro, traes otra cosa)
Ve a ver si tu padre sigue en la cantina.
Dile a tu papa que ya se venga. (Cuando tú papa sigue en la cantina)
Te voy a poner una chinga de perro bailarín. (O sea, te van a pegar]
Esto me va a doler más a mí que a ti.
¡Ni se te ocurra!
Por eso Dios no le da alas a los alacranes (dícese del momento en que después de una riña, le respondiste)
¡Tengo la boca chueca de repetírtelo!
¡Métete para adentro! / Salte para afuera!
Comete eso, hay muchos niños en África que no tienen que comer (y es cuando tú piensas..... (Pero si no vivimos en África, ni modo que les mande mi sopa por correo....")
Si no haces caso, te va a llevar el coco! (el internacional coco eeh!!!)
Te lo tragas o te lo meto con un palo! (si, las mamas mexicanas suelen tener....mucha sutileza en sus métodos educativos...)
Mientras vivas bajo mi techo, con mis reglas....([Esta, también la usan los papas)
Dios te va a castigar con un hijo igualito a ti ¡eeh!
Te voy a pegar para que llores con ganas.
Me importa un cuerno si la mamá de "fulanito" le dio permiso, yo soy tu madre y no vas a ningún lado!!!
Tienes hasta tres para que lo hagas...1...2... (y si llegó al tres, ya sabes que la probabilidad se convierte en realidad)
Te quitas esa porquería de la cabeza y te peinas decente, pareces vago!
Ya te dije que no digas pinches groserías, cabrán!
Pero hay un dios!!!
Cuídate, No desconfío de ti sino de los otros. Lo importante es que tu regreses bien, el auto cualquier cosa se arregla”
No quiero nada de regalo, sólo que se porten bien
¿Así vas a salir a la calle? Sécate el pelo por favor, después andan que les duele la garganta y tiene que salir la boluda a comprar….
No les cuesta nada bañarse más temprano. No, señor, todo a último momento, después les da un golpe de aire y quedan con el cogote (garganta/cuello) duro y vienen a llorar acá
El señor no se sabe limpiar la cola y quiere salir con sus amigos, ¡qué tal!
No vino la muchacha (sirvienta) hoy asique levanta ¡ya! ese plato/taza y limpia la cochinada que dejaste en la mesa, que yo no soy tu sirvienta”
No te lo comas todo, déjale un poco a tu hermano.
Llego hecha mierda del trabajo y los señores preguntan: ¿Qué hay de cenar? ¿Acaso no tienen manos? ¿No aprendieron a abrir el refrigerador? No, claro, quien tiene que solucionar todo siempre soy yo. Si no vengo yo se mueren de hambre.
Porque yo soy su mamá ¡y punto!
No me levante la voz que no soy sorda.
Tiendan la cama y laven sus calzones.
No sé qué van a hacer cuando yo me muera.
Dejan todo por ahí tirado...Claro, como yo soy la sirvienta de esta casa
Cuando tengan hijos van saber lo que es una madre.
Se creen unos dioses, pero no se acuerdan que a mí me tocó limpiarles la cola cuando estaban niños.
¡Claro!...Como ya sienten vergüenza andar con una.
Son unos desagradecidos...Uno trabaja como una mula, y ni siquiera se lo agradecen
Lo tratan a uno como a un trapo sucio, pero a la gente de la calle si los respetan
Como a ti no te cuestan las cosas
Esta casa no es Hotel como tú no lavas tu ropa
Dale de comer al Perro, para eso querías tener animales.
Yo ya cuide a mis Hijos, ahora cuida a los tuyos.
Es mejor que vaya comido, porque uno no sabe con qué le van a salir.
Para que le hagan un favor a uno hay que arrodillarse, en cambio viene cualquiera de la calle y salen corriendo.
No se le olvide que primero fue mamá que novia.
Me hace el favor y le dice a su amigo que se baje y timbre, que esto no es una casa de citas para estar pitando.
Usted qué cree ¿que esto es un hotel? (el usted o el nombre completo, son signos enfáticos de enojo)
No me abra los ojos...que no le voy a echar gotas.
Para qué me preguntan si van a hacer lo contrario.
M´ijo, ¿usted sí está comiendo bien?
Eres igualito a tu papá (nunca se dice como alabanza, sino como señalamiento de lo malo)
No les habremos dado lujo ni riqueza, pero les dejamos ejemplo y estudio.
En la calle son solo risas y en la casa todo les molesta.
Cuando tengan hijos se van a acordar de mí.
Vaya pregúntele primero a su papá, a ver él qué dice.
¡Con usted todo es una lucha! Estas no son horas de llamar a una casa decente
Me puedo estar muriendo y ustedes no le pasan a uno ni un vaso de agua
El teléfono no es para hacer visitas.
Ese cuarto suyo parece un chiquero, no tiene arrimadero.
Qué van a hacer el día que me muera, quién les va a hacer todo...
¡Es que esas mujeres de ahora no saben hacer nada!
Eso era que no le convenía. Lo que es de uno, es de uno.
¿Amigos?, amigos lo que tenga en el bolsillo.
¡Ah! Usted verá, para qué no me hizo caso.
El día que me convierta en un estorbo y en una carga para ustedes van y me tiran a un ancianato
Creen que porque ya dan algo en la casa pueden tratarlo mal a uno
Una cosa es libertad y otro libertinaje
No hay como el "hotel mama”
Hasta la una, ni un minuto más
¡No hay poder humano que lo convenza!
¿A qué hora va a llegar? (nunca se sabe, solo se dan referencias, lo más vagas posibles)
¿Por qué no me contesta el celular?
Cuándo será que tienen tiempo para mí.
¿Eso es lo que le enseñan en el colegio?
Porque yo soy su mamá ¡y punto!
Un día de estos se levantan y no me van a encontrar, y a ver qué hacen...
Como aquí tienen a la 'sirrrrvienta' que les hace todo.
Todo lo que me he sacrificado por ustedes y miren cómo le pagan a uno.
Ese es el ejemplo que les está dando a sus hermanos.
¿Tú sí rezas y se persignas antes de dormirte?
Uno les contesta el teléfono y ni siquiera dicen buenos días mamá o por favor
Para que hagan las cosas bien hay que estar detrás de ellos.
Yo no sé por qué esta juventud de ahora se mantiene muerta de pereza y no sirve para nada.
Usted no se manda solo, cuando trabaje y se mantenga, hablamos.
Mientras usted viva en esta casa, se hace lo que yo diga.
¡Ustedes me van a volver loca
Pero si se acaban de ver, no entiendo por qué siguen hablando por teléfono.
Esa amistad no me gusta. Yo ya les enseñé lo bueno y lo malo, ustedes verán.

martes, 6 de mayo de 2014

CONFESION

  
“Ven a Ankor amigo mío, a sus ruinas y a sus sueños…”

"Puede ser que tú pienses que has hecho tanto mal que ya no eres considerado hijo de Dios, pero debes recordar que Dios te sigue llamando Su hijo.
Rabí Najman de Breslaw

Los musulmanes se saludan diciendo “Salam aleikum” y se responde Aleikum Salam”, la paz sea con vosotros y se contesta con vosotros sea la paz. Las bendiciones que das son las mismas que recibes.

No he dormido, solo doy vueltas en la cama, me tapo, me descubro, mi cabeza sigue pensando, nunca deja de pensar, es como un péndulo, un movimiento constante, infinito, por eso creo que el péndulo es el reloj de Dios.

Reviso mi vida, es cuando me doy cuenta que soy un recuerdo a través de tantas vidas, acaso y tan solo un pequeño momento, tan simple, tan sencillo, a veces creo que cada vez existo menos, que el recuerdo se desvanece al amanecer.

Voy mirando y así surgen de entre las sombras mis recuerdos, yo no soporto que me griten ni que me golpeen, ambas cosas me aterran, me paralizan, realmente me entumen el alma, me dan miedo, mucho miedo y cuando hurgo en mi memoria, cuando busco dentro de mí me llega ese momento, ese instante en el cual los soldados me golpeaban, me gritaban, me insultaban, me humillaban y yo no hacía nada, estaba paralizado, no recuerdo que alguna idea, algún pensamiento cruzara por mi mente, de mi boca solo salía el dolor, la angustia:
 
“Debo admitir una inferioridad total mía: nunca he sabido devolver el golpe, no por santidad evangélica ni por aristocracia intelectualista sino por incapacidad intrínseca. Quizá por falta de educación política seria; en realidad no hay programa político, ni el más moderado y menos violento, que no admita algún tipo de defensa activa. Tal vez por falta de valor físico; lo tengo hasta cierto punto ante las catástrofes naturales y la enfermedad, pero he estado siempre totalmente desprovisto de él ante la persona que arremete", Primo Levy.

Yo tenía como ocho años cuando conocí a mi padre, Rubén, hombre que se fue poco antes de que yo naciera, sencillamente se alejó, esa fue mi primera ausencia, desconozco sus razones, con los años he aprendido a aceptar este hecho como algo que sucedió, él era alcohólico, lo vi unas tres o cuatro veces, mi madre lo busco para que yo tuviera una imagen masculina.

Un domingo llego temprano a la casa, muy de mañana, yo dormía, me despertó, toco a golpes, mi madre salió a abrir, escuche la voz del hombre borracho que dijo “vengo por mi hijo”, por supuesto que mi madre lo detuvo y el sencillamente se fue, yo me escondí bajo la cama creo que me orine, el miedo era terrible, ese recuerdo sigue vivo en mi mente, años después nuevamente escuche gritos, groserías, mientras me golpeaban, por eso cuando alguien grita sencillamente me abruma, no sé cómo actuar.
 
Mi padre me enseño lo que no quise ser, nunca pude pensar en dejar a mis hijos, como tampoco gritar ni ofender, no admitir la violencia y no ser un alcohólico.

Lo volví a ver cuándo me titule, fui a mostrarle mi título, de hecho él fue un gran aliciente para que yo concluyera mis estudios, quería demostrarle que nunca lo necesite, con eso aprendí otra cosa, la venganza es estúpida, porque cuando la logras, te quedas vacío, has perdido demasiado y tienes que volver a buscar, si aprendes la búsqueda será con otro fundamento distante a la venganza.

No puedo negar que me he embriagado muchas veces en mi vida y muy pocas fueron gratificantes, aprendí que eso te hace sufrir y duele demasiado, desde hace tiempo que decid no volver a hacerlo, es algo que me avergüenza y me hace sentir como si mi padre fuese yo, me da miedo ser como él.

Del amor, este es un viejo amigo, un amigo ausente, alguien que se fue y que deja un extraño sabor de boca, de gozo, de felicidad, de tristeza, de soledad. He aprendido que el amor es un don, un regalo que a algunos lo dejamos, nunca creció.

“El amor está compuesto de contrarios pero que no pueden separarse y que viven sin cesar en lucha y reunión con ellos mismos y con los otros. Estos contrarios, como si fuesen los planetas del extraño sistema solar de las pasiones, giran en torno a un sol único. Este sol también es doble: la pareja. Continua transmutación de cada elemento: la libertad escoge servidumbre, la fatalidad se transforma en elección voluntaria, el alma es cuerpo y el cuerpo es alma. Amamos a un ser mortal como si fuese inmortal. Lope lo dijo mejor: a lo que es temporal llamamos eterno. Sí, somos mortales, somos hijos del tiempo y nadie se salva de la muerte. No sólo sabemos que vamos a morir sino que la persona que amamos también morirá. Somos juguetes del tiempo y sus accidentes: la enfermedad y la vejez, que desfiguran al cuerpo y extravían al alma. Pero el amor es una de las respuestas que el hombre ha inventado para mirar de frente a la muerte. Por el amor le robamos al tiempo que nos mata unas cuantas horas que transformamos a veces en paraíso y otras en infierno. De ambas maneras el tiempo se distiende y deja de ser una medida”.

“El amor es atracción involuntaria hacia una persona y voluntaria aceptación de esa atracción.

La atracción es un compuesto de naturaleza sutil y, en cada caso, distinta. Está hecha de humores animales y arquetipos espirituales, de experiencias infantiles y de los fantasmas que pueblan nuestros sueños. El amor no es deseo de hermosura: es ansia de ‘completud’. Unión indisoluble de dos contrarios, el cuerpo y el alma”.

“El amor mezcla la tierra con el cielo: es la gran subversión. Cada que el amante dice: te amo para siempre, confiere a una criatura efímera y cambiante dos atributos divinos: la inmortalidad y la inmutabilidad. La contradicción es en verdad trágica: la carne se corrompe, nuestros días están contados. No obstante, amamos. Y amamos con el cuerpo y con el alma, en cuerpo y alma”, Octavio Paz en La llama doble.

Hoy que la mayoría de mi vida ha transcurrido me doy cuenta de que todavía puedo amar, que es posible soñar, recupera y volver a recitar ese salmo que se extravió hace tantos año, hoy me doy cuenta que aunque no haya nadie, la vida en este futuro adquiere relevancia y textura porque aun soy capaz de sentir, de amar, de volar…

El amor te hace llorar, te hace reír, te hace carne y deseo, el amor te vuelve vivo, por eso ...llora cuanto quieras, que el amor se deshace con lágrimas...

Se han puesto ya la luna y las pléyades. Es media noche. Pasa el tiempo. Y yo sigo durmiendo sola, Safo.

Creo que me he vuelto con la edad más sentimental, lloro con tanta frecuencia, debe ser por todos esos años en que no lo hice, debe ser por los dolores y tristezas que guarde muy profundo y que hoy salen como si fueran nuevos, debe ser porque nadie me dijo jamás que llorar alivia el alma

Algo que me llama profundamente la atención, es la necesidad de los humanos de controlar, subyugar, violar, destruir a otros seres humanos, sin embargo, creo con toda firmeza que la búsqueda de la libertad, del derecho a ser y a existir sin cadenas, construyendo vidas felices es lo que hace de la humanidad el sueño de Dios.
 
La libertad, es a la vida el cuerpo de esa, nuetra alma, es el canto y la flor, por ello creo que la libertad nace de la paz no de la violencia, no del hartazgo, ni del poder (¿acaso existe amo más poderoso que el deseo y el poder?)

Siempre he sido un solitario, de hecho me es difícil estar con grupos amplios de personas, soy alguien que vive hacia adentro, mi vida se vuelve intensa, es por ello que la música, la literatura y el arte en general me llenan, me hacen vibrar, a veces creo que yo soy tan solo una isla, un lugar extraviado que no desea ser encontrado.

Thomas Mann describe muy bien lo que es un hombre solitario, “Los sentimientos y observaciones del hombre solitario son al mismo tiempo más confusos y más intensos que los de la gente sociable; sus pensamientos son más graves, más extraños y siempre tienen un matiz de tristeza. Imágenes y sensaciones que se esfumarían fácilmente con una mirada, con una risa, un cambio de opiniones, se aferran fuertemente en el ánimo del solitario, se ahondan en el silencio y se convierten en acontecimientos, aventuras, sentimientos importantes”.

La escritura no es un arte para mí, es una forma de expresión y reflexión, es un camino, aunque debo confesar que con bastante frecuencia al encontrarme con una hoja en blanco (verdadera o virtual), me siento desolado, es como ser una pequeña nave en medio de la nada y conforme la tinta va marcando la hoja las olas surgen y así la mar existe y con ella las estrellas, con esto, saco mi sextante y mi astrolabio y miro al cosmos y me doy cuenta que no estoy perdido, solo brego por mares nuevos pero siempre maravillosos.

Por eso la palabra para mi es el alma, el sentido mismo de la vida, la palabra creo el cosmos, la palabra creo a los humanos, las plantas y todo lo que existe en la tierra, la palabra es un bisturí o una espada, abre y hace disecciones, abre y destruye, la palabra es puente y camino, es el lucero de la mañana, la verdadera luz de la eternidad.

De mi familia, de ellos se muy poco, mis abuelos paternos, ella era inglesa, él era veracruzano, hombre rico, ganadero y terrateniente, murió asesinado durante una partida de cartas, mi abuela viuda con cinco hijos, solo busco como sobrevivir.

Mis abuelos maternos, un abuelo sastre, quería ser médico, pero su padre lo corrió de su casa cuando tenía como 17 años pues tenía viruela, le dio un peso y una frazada, de mi abuela es muy poco, lo único es que yo la quería mucho.

Así, no hay ancestros, no hay linaje, sin embargo es cierto, ellos existieron y están aquí para que yo exista y yo estoy aquí para que mis hijos existan.

Decía el buen Sancho Panza a su señor Don Quijote "en cueros nací, en cueros estoy, ni gano ni pierdo", yo sé que he vivido, hoy digo como Pito Pérez ¿Qué favor le debo al sol por haberme calentado…?

Alejandro.