Así era y era un símbolo de toda una época, la mía.

 

Yo nací en la calle de Manuel Doblado 139, colonia del Carmen, en el centro, yo digo que es Tepito, mi madre dice que Tepito empezaba de la esquina pa´lla, en una vecindad, mi abuelo era un sastre y mi madre se dedicaba a ser cultora de belleza, mi abuela Concha me cuidaba, en 1985 la construcción fue una de las víctimas de los sismos, ahí solo viví dos años, después fue en la colonia Condesa y cuando convirtieron la hermosa calzada de Tacubaya en una vía rápida (circuito interior, que no es rápida, por cierto) me quede en la colonia San Miguel Chapultepec, siempre a una cuadra del fabuloso y mágico Bosque de Chapultepec, mi madre vivió ahí por 50 años, yo hice mi vida y desde entonces he vivido en varias partes del DF y del país, pero fueron en esos años cuando me fui enamorando de mi ciudad y de lo que para mi representa, mi identidad y cultura, mi hogar, hoy que me ha caído la nostalgia y la evocación les invito a compartir algunos momentos que creo que podremos volver a sentir.

Estos son los slogans y los jingles de la radio mexicana, de algunos de los anuncios con los que crecí, de hecho, hasta que nos cayo la globalidad y la modernidad, muchos de ellos se continuaban transmitiendo, después, sólo desaparecieron y bueno, ahora ya no existen, sin embargo su importancia en nuestra cultura es definitiva.

Algunas de las expresiones populares más usuales hoy en día son realmente cripticas para aquellos que tienen menos de 40 años, mis hijos a pesar de haberlas escuchado, no las usan porque carecen ya de contexto, por ejemplo “…no le cayó el veinte”, es decir que no entendió y se refiere a que el costo de una llamada telefónica por tres minutos era de 20 centavos.

Así, poco a poco se van perdiendo las expresiones y modismos usuales, sin embargo algunos programas que se trasmitieron y que dieron un perfil nacional, curiosamente tanto los jingles como los slogans de los programas ayudaron a crear una identidad nacional, sólo por debajo de la Virgen de Guadalupe y de algunos Héroes patrios, llenos de mitos, como suelen ser todos los héroes, quizá por ello la radio creo identidad, porque a fin de cuentas reflejaba más l que éramos y por ende nos daba identidad y pertenencia, algo cada vez más escaso.

Hoy les dejo con algunos que he encontrado y que recuerdo, un poco de nostalgia y evocación, ahora que la globalidad rompe identidades y deja a la mayoría sin saber si pertenecen a lo propio o a lo imperial.

Un gran y nostálgico saludo.

Alejandro.

  

Algunas de las estaciones de radio eran:

XEW “La voz de América Latina  desde México”.

XEQ

XEQK-AM

Jingles y Slogans

Carlos Cerro el Hombre Bomba, no tiene sucursales.

Chocolates Turín, ricos de principio a fin.

Pida el tamaño ideal de barril Corona, con más cerveza Corona de barril.

Corona y Coronita, tan sabrosa la grandota como la chiquita.

Muebles Baltazar, en la esquina que domina Aldama y Mina, en Buenavista.

De Sonora a Yucatán se usan sombreros Tardan.

No hay cuervo que no sea negro ni Tequila que no sea Cuervo.

Haste, la hora de México, ponga a tiempo su reloj, esta es la hora exacta.

La hora del Observatorio, misma de Haste, Haste la Hora de México.

Para Petacas las De Miguel-el Coco de los Petaqueros.

Cuando era niño e iba a la primaria, allá por finales de los años 50 y a principios de los años 60´s mi madre encendía todas las mañanas el radio y con esta belleza me despertaba.

Así fue durante casi 50 años o más lo que se escuchaba con la XEW “LA VOZ DE LA AMERICA LATINA DESDE MÉXICO"

A “Porfirio Cadena, El ojo de vidrio”, a “Kaliman, el hombre increíble” y a ·tres patines y la tremenda corte” los conocí cuando vivía en Guanajuato, prácticamente no había casa de campesinos donde a las 2:00 PM se encendiera la radio y lo escucharan, años después, vi lo que es el imperialismo mexicano, se escuchaba con tanto fervor en Centro América, en Nicaragua, Honduras y el Salvador se llegaban prácticamente a suspender los combates para escucharlos.

Mi ciudad, esa ciudad que tenia identidad, donde te sabias parte de ella, ese era tu lugar, ahora ya no es así, esa ciudad se ha ido y si estas en las zonas empresariales o los nuevos lugares y los ya modernizados, te puedes sentir globalizado, aunque no mexicano ni defeño, ni latinoamericano, así que en esto de la nostalgia, tema que por cierto me llena y que en otro momento volveré a tocar, les dejo con dos pequeñas joyas para concluir.